El Tribuno

Jair Bolsonaro, más allá del balotaje

Aunque Lula quedó muy cerca de ganar en la segunda vuelta, el actual presidente muestra la vigencia del conservadurismo en Brasil.

Por BBC News Mundo

Cuando el ultrade-echista Jair Bolsonaro ganó la presidencia de Brasil cuatro años atrás, muchos se preguntaban si el suyo sería un fenómeno político efímero, como tantos otros en América Latina. La respuesta llegó con las elecciones el domingo 2 de octubre.

El bolsonarismo se afirma como una fuerza política más vigorosa de lo que se predecía en Brasil, y su líder disputará un balotaje con el expresidente izquierdista Luiz Inácio Lula da Silva el domingo 30 de octubre que está abierto, según distintos analistas.

Lula logró 48,4% de los votos en la primera vuelta del domingo y quedó primero, mientras Bolsonaro obtuvo 43,2% y es el único presidente brasileño que ha entrado a un balotaje con menos apoyo que su rival. El presidente brasileño recibió más respaldo que lo proyectado en sondeos previos. Y esto revela algunas realidades. Bolsonaro fue electo en 2018 en medio de una colosal crisis económica y política en Brasil, luego de megaescándalos de corrupción que involucraron al Partido de los Trabajadores (PT) de Lula y sus aliados en el gobierno.

El ascenso político del excapitán del Ejército, quien expresó nostalgia por el régimen militar que Brasil tuvo entre 1964 y 1985, fue visto entonces como un reflejo del desencanto popular con la clase política. Pero algunos observadores creen que Bolsonaro también se volvió líder de una ola conservadora surgida en la última década en Brasil como reacción a la expansión de derechos de minorías en democracia.

La fortaleza del bolsonarismo quedó expuesta más allá de los votos recogidos por el presidente el domingo. El Partido Liberal (PL), al cual Bolsonaro se afilió en noviembre del año pasado, se aseguró 98 diputados federales en una cámara de 513 y tiene así la bancada electa más numerosa de Brasil en los últimos 24 años.

Se trata de un salto gigante para un partido que en las elecciones de 2018 logró 33 diputados y tenía entre sus figuras más notorias al exfutbolista Romário y a un payaso conocido por su nombre artístico de Tiririca. Mientras, el PT, la mayor fuerza política brasileña en lo que va de este siglo, obtuvo 76 asientos de diputados (20 más que en la actual legislatura). El PL también tendrá la mayor bancada en el Senado.

Por otro lado, candidatos a gobernador aliados a Bolsonaro salieron primeros en los tres estados con más votos del país: el de SÒo Paulo irá a un balotaje con un rival del PT, mientras los gobernadores de Minas Gerais y Río de Janeiro fueron reelectos en primera vuelta.

En los estados del noreste Lula ganó con amplia ventaja, mientras en los del sureste, más rico y blanco, Bolsonaro venció por mayor margen. El presidente pareció recibir un respaldo importante de la clase media de las ciudades; Lula tuvo un apoyo esperado de los votantes más pobres, pese a que Bolsonaro les aumentó la asistencia.

“El conservadurismo siempre fue un aspecto importante de la política brasileña. Pero lo que vemos es que el bolsonarismo hace ese conservadurismo más extremista, más orgánico y centrado en sus propias agendas”, dijo Magna Inácio, profesora de Ciencia Política en la Universidad Federal de Minas Gerais.

Opinión

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2022-10-06T07:00:00.0000000Z

2022-10-06T07:00:00.0000000Z

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