La Confederación de Nacionalidades Indígenas de Ecuador (Conaie) y otras agrupaciones promotoras de las protestas sociales se reunieron ayer con funcionarios del Gobierno, cuando se cumplen 15 días de protestas contra la administración del presidente Guillermo Lasso, motivadas por el alto costo de la vida.

La Conaie dijo que la reunión “con los cinco poderes del Estado” arrancó a las 14.00 hora local (16 hs. de Argentina).

Este encuentro se produce después de que el Gobierno y los líderes del movimiento indígena tuvieran un primer contacto el sábado, y luego de que ambas partes hicieran gestos para rebajar la tensión de un conflicto que, según las organizaciones de derechos humanos, registra ya 5 fallecidos y más de 200 heridos.

“Por decisión colectiva de la Conaie, Feine (organización de indígenas evangélicos) y Fenocin (Confederación de Organizaciones Campesinas, Indígenas y Negras) aceptamos la invitación hecha”, dijo la Conaie. En un mensaje, el movimiento indígena precisó que la reunión busca “canalizar espacios técnicos y eficientes para que las demandas de la agenda nacional de 10 puntos tengan resultados y sean garantizadas”.

El pasado sábado, representantes del Gobierno se reunieron directamente con el presidente de la Conaie, Leonidas Iza, en un primer contacto tras 13 días de movilizaciones.

Ese encuentro se concretó tras una convocatoria del presidente de la Asamblea Nacional, Virgilio Saquicela, quien enfatizó que Ecuador necesita diálogo para solucionar la crisis.

Saquicela informó entonces que en esa reunión se propuso conformar una mesa técnica con delegados del movimiento indígena y del Gobierno para iniciar el proceso de diálogo y analizar cada una de las propuestas de los manifestantes.

Desde el movimiento indígena se exige el cumplimiento de un pliego de diez demandas, entre ellas que se reduzcan y congelen los precios de los combustibles, que se controlen los precios de los productos de primera necesidad, que no se privaticen empresas estatales y que no se amplíe la actividad petrolera y minera en la Amazonía.

El presidente, cercado

Acosado por las protestas y el Congreso, Lasso ha cedido parcialmente en algunos de los reclamos. Así, el jueves permitió a unos 5.000 manifestantes alojarse en la Casa de la Cultura, un lugar simbólico, que estuvo hasta entonces controlado por la Policía. A esto se suma que el sábado puso fin al estado de excepción que abarcaba a 6 provincias. Y el domingo redujo US$10 centavos los precios de los combustibles.

“Esta decisión no es suficiente, es insensible”, expresó la Conaie, después de que Lasso anunciara la reducción que deja el galón de diésel en 1,80 dólares y el de nafta en 2,45.

Los manifestantes exigen que se bajen los precios a 1,50 y a 2,10 dólares, respectivamente.

Mientras tanto, los cortes de ruta y la toma de más de 1.100 pozos tienen en jaque al petróleo, principal rubro de exportación. Si las protestas continúan, el país podría dejar de producir crudo en 24 horas.